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Dios es Trinidad

Dios es Trinidad

Los tres hacen todo unidos.
  • Dios nos ama infinitamente y nos habla a través de su palabra escrita, para brindarnos una amistad profunda y dadora de vida.
  • Su Hijo Jesús nos incorpora a la vida de Dios, como hijos suyos, nos libera del pecado, nos llena de amor, gozo, esperanza y nos señala el camino del Padre.
  • Su Espíritu nos guía, fortalece y ayuda a compartir con otros el gran regalo del amor de Dios.
Todo esto sucede
sólo con nuestra aceptación libre y consciente.

Padre Bueno,
que me creaste a tu imagen y semejanza,
a veces me olvido de esto y mi vida pierde sentido.
Permíteme siempre sentirme como tu hijo predilecto
y gozar de tu amor, perdón, justicia y paz.

Jesús,
gracias porque me invitas a ser tu amigo
insistes en darme lo mejor y me enseñas cómo lograrlo.
Quiero responder a la invitación que me haces
dejando que guíes mi vida, me libres del pecado
y me ayudes a vivir el reino de Dios.

Espíritu Santo,
abre mi corazón al amor e impúlsame a compartirlo;
dame el valor y la sabiduría que necesito
para seguir a Jesús.
Lléname de tu fuego motivador
y dame la paz y el gozo
que vienen de hacer la volutand de Dios.

Amén.

«La gracia de Jesucristo, el Señor, el amor de Dios
y la comunión del Espíritu Santo estén con ustedes»
2 Corintios 13:13

El Espíritu Santo en nuestra vida

La Santísima Trinidad
Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo
del que procede toda gracia.

«Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo»

«Y cuando venga él, el Espíritu de la verdad,
los quiará en todos los caminos de la verdad»
Jn 16: 13

El Espíritu Santo en nuestra vida
Sin el alma, aunque un órgano o miembro del cuerpo esté completo, no sirve; es un cadáver.

Sin el Espíritu Santo en nuestra vida, sólo somos cristianos de nombre: inútiles ramas secas en el tronco de la vid.

En cambio, cuando el Espíritu Santo vive en nosotros, nos da fuerza, gozo, poder, alegría…

Su acción nos:

  1. Abre a la vida de Dios, ayudándonos a vencer los prejuicios, reconciliarnos, propiciar la unidad en la diversidad, trabajar por la justicia y la paz.
  2. Libera de adicciones que nos esclavizan al placer y los bienes materiales, permitiéndonos actuar con libertad ante las presiones socioculturales contrarias al evangelio.
  3. Ilumina para conocernos a nosotros mismos y descubrir la presencia de Dios en nuestra historia.
  4. Proporciona paz en el sufrimiento, cuando nuestras expectativas no se cumplen y ante la falta de seguridad en la vida.
  5. Mantiene la esperanza de un mundo mejor aquí y ahora, y del que gozaremos para siempre de Dios y de nuestros seres queridos en la vida futura.

Ordena las cinco acciones del Espíritu Santo, según la necesidad que tengas de ellas en esta etapa de tu vida.

Haz unos momentos de oración abriéndote por completo a la obra transformadora del Espíritu que habita en tí.

Juan 16: 12-15